AUN QUEDAN RAFAGAS DEL DIA DEL AMOR
Bueno, y ya pasó el día de las enamorados. Ese dichoso día de gloria para unos pocos y angustia para muchos, porque incluso los enamorados también presentan angustias y dudas ante lo que se espera de ellos el día del amor. Un día al año, un día en el que deben lucirse, ofrendar, recibir y donde se supone todo debería ser idílico, luego…
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El humor, lo cómico y el chiste han sido temas de estudios en todos los tiempos, incluso temas de interés para el psicoanálisis y al que Freud también dedicó estudio y posteriores escritos al respecto. Hace un tiempo, estando en una entrevista donde conversábamos acerca de las dificultades que imperan en la actualidad y la mirada que se puede dar desde el psicoanálisis al respecto, me instigaban una y otra vez al humor y a chistes difíciles que hacían que lo conversado se volviera complicado e inentendible para el auditorio. Aquello iba mucho más allá de la imagen que se suele tener de los psicoanalistas como neutros y sobrios, una cosa era sonreír y otra hacer parodia de lo difícil. Insistían en que: “la gente lo que quiere es el jijijaja”. Fue una entrevista difícil pero a pesar de ello, salimos más o menos airosos de tan comprometidas y difíciles formas de comentar la actualidad, además intentando llevarlo a un terreno personal que en nada podrían arrojar veracidad o no al tema en cuestión. Me quedé pensando varios días en ello y en aquella demanda como demanda contemporánea e insistente y un tanto macabra también. El humor resulta como mecanismo inconsciente que permite una salida amable ante las dificultades entre el yo y el todo poderoso, figuras superyoicas, de autoridad, por mencionarlo de algún modo para que resulte entendible. En medio de una parodia se logra conquistar esa angustia y se ridiculiza, como una estrategia del lenguaje. Una herramienta de los efectos de la cultura en los sujetos que cuando sucede, resulta útil en la vida cotidiana y en especial en un proceso analítico, como también los lapsus y los fallidos. El chiste sin embargo nos suele hacer reír por su relación con lo prohibido. Suelen ocultar algo de manera textual y funcionan más a nivel de metáfora. Cuando hay que explicar un chiste pierde todo su encanto, en el momento que hay que desvelar aquello oculto y sólo imaginado que hacía que tal comentario fuera jocoso. Resulta también interesante como un medio a través del cual se dice aquello que no se atreve a decirse de otra manera. Supongamos que se encuentran dos personas y una de ellas va totalmente vestida de negro y al saludarse con su conocido éste se le ocurre decirle en forma de chiste y con una sonrisa, que vaya color con el que se vistió hoy, que parece un “zamuro”, pero con la misma sonrisa continua su alegato para decir que el negro “también” es un color elegante. Sin duda, encontró la forma de decirle “zamuro” y que no le gustaba nada como iba vestido, pero sin decirlo directamente. Si un tercero hubiera presenciado la escena quizás se hubiera sonreído y con suerte sus mismos protagonistas, también. Algún otro se hubiera irritado y no con falta de razón, a lo que seguro le hubieran alegado ¡falta de humor! Lo cómico es diferente, tiene relación con la imagen, un ejemplo casi textual, la caída de alguien al andar suelen ocasionar risa, se le atribuye algo cómico, pero esa caída en realidad produce una angustia que se la ha compensado con la risa. La risa es un rasgo humano, Nietzsche decía que “La potencia intelectual de un hombre se mide por la dosis de humor que es capaz de utilizar”.La risa además suele ser contagiosa. Pero hay que separarla del sarcasmo y la ironía que hablan de algo diferente, más bien de una impostura. Es cierto que utilizar el humor como medida de alivio ante el sin sentido de la vida, en ocasiones puede ser útil, pero utilizar el “jijijaja” como medida de evasión ante esa realidad que impera y resulta dolorosa, sólo es un modo de permanecer en esa situación, de sumergirse más ante esa dificultad y no permitirse un espacio de pensamiento y elaboración subjetiva que permita que la risa y el humor puedan ser protagonistas de nuevo, pero desde la seriedad que compone el humor y no desde su propia parodia. Todos habremos conocido esas personas que ríen alto, que gritan mucho para llamar la atención y tratan de mostrarle al mundo lo muy felices que son, y después tienen esas caídas depresivas que muchos habremos podido constatar, incapaces de enfrentarse a sus propias pérdidas y angustias. El recurso del humor nos lo devuelve la infancia en su mayor exposición, os recuerdo la película “La vida es Bella”, escrita, protagonizada y dirigida por Roberto Benigni. El humor fue sin duda un recurso útil, que le permitió a aquella familia sobrevivir anímicamente ante la inclemencia de la barbarie humana. Pero el humor es cosa seria y para tomárselo en serio también. El humor es bienvenido, su justa medida es difícil de encontrar, al igual que en la música, lo que a uno le calma a otro le angustia, sin embargo, el humor como herramienta es deseable, pero que se convierta en un “jijijaja” que nada ofrece y todo evade, sólo es pulsión de muerte disfrazada de alegría. Humor sí, “jijijaja” ya veremos… Volver arriba.
Y comienza “otro” nuevo año según marca el calendario y parecen confirmar los efectos de las fechas decembrinas. Una vez pasado la efervescencia y esfuerzos de las Navidades, toca toparse con el nuevo comienzo, sin embargo no deja de ser eso, “otro” año, ajeno y sin garantías. Otra cosa será qué se hace con él. Es común escuchar y observar las esperanzas depositadas en cada nuevo año, como si éste fuera a “traer” “no sé qué” de lo esperado, pero aunque sea “que traiga algo”, dicen algunos, y ahí es donde el nuevo año se convierte simplemente en uno más, alejado de la posibilidad de “conseguir” más que de esperar. Este decir popular ante las personas que atraviesan adversidades, tales como “debes pasar página”, “olvida tal cosa”, “piensa en positivo y verás que lo consigues”, obvian la contingencia de lo humano, su complejidad y su inconsciente. No existe el fin y el comienzo sino un proceso de continuidad, con lo cual el nuevo año será una continuidad de lo que se venía forjando y lo que se es capaz de conquistar y lograr. Pero una vez más es un trabajo único, que amerita esfuerzo y no una dádiva de cada año que comienza. Pensar en aquello que se quiere alcanzar y poder arrancar para ir a su encuentro resulta mucho más rentable, que realizar una pequeña apuesta a ver si toca la lotería del éxito, del logro, del encuentro, porque el “deseo” no funciona así. A veces escucho comentarios metafóricos como “sé que no lo conseguiré, pero moriré con dignidad”, o “morir matando”, o “aunque muera en el intento me lanzo”, todas estas frases, por mencionar algunas, llevan implícito el fracaso y la pérdida, el sujeto “lo sabe” y es fácil dejarse llevar por este camino de goce. Dicho así, ese sería un camino sólo para eso, para no poder. Y aunque parezca un sin sentido, así funciona a veces el inconsciente. Hay que tener cuidado con este tipo de afirmaciones, pues el inconsciente definitivamente no tiene buen humor y si hay algo es consecuencia del discurso. Entonces no se trataría ni de lanzarse al vacío, ni de esperar que el cosmos a través de la mente positiva obsequie una vida mejor en aras del yo ideal. Lacan decía: “Sólo se siente culpable quien cedió en su deseo”, no sentirse culpable o arrepentido por haberse despojado del camino del deseo, es lo mejor que se puede intentar, a pesar del esfuerzo, de lo poco gratuito que contiene, de lo fallido a su encuentro, que sólo resultará en el mejor de los casos en una lanzadera “ad infinitum”. El nuevo año, como cada día, trae la opción como oportunidad de elaborar las complejidades de los recorridos para poder realizar de manera activa una siguiente apuesta, con sus nuevas complejidades, en lo esperable, un tanto menos mortíferas y más ligadas al acotado placer. ¡Feliz Año Nuevo! Volver arriba
Hay personas que creen que las relaciones son complicadas en general, luego hay otro grupo que alega que no es tan complicado, que cuando las cosas funcionan los problemas se disipan. Hay un dicho popular aún más complejo que dicta: “Hablando se entiende la gente”, y así muchos sujetos se quedan pensando qué les pasa a ellos que en ocasiones, por mucho que se converse sólo parecen enredarse más las cosas. Las relaciones son complejas “siempre”, por el simple hecho de que aquello que nos diferencia del resto de los animales nos suprime esa simplicidad puramente animal, es esa benevolencia y dificultad a la vez la que se le otorga a “lalengua”. En psicoanálisis las palabras nunca pueden definirse de manera genérica y es por ello que muchas veces en sesión se le invita al analizante a que alegue un poco más sobre aquello que menciona, a fin de poder abrir el paso al discurso particular de lo que para él/ella significa tal y cual cosa. Tal dificultad nos lleva a un camino de vacío e imposibilidad en cuanto a lo pleno. Las personas buscan continuamente situaciones deseadas con las cuales en ocasiones sólo se coquetea y en otras parece que se logra, pues el deseo se muestra siempre insatisfecho en cuanto a su alcance imaginario, lo que permite que el proceso se relance una y otra y otra vez. Vivir es complicado, contiene frustraciones constantes, momentos repetidos de dudas, desánimos, enfermedades, cambios que no se pudieron divisar, fallecimientos. Eso es lo que supone estar subido a la vida, y en medio de todo eso complicado, existe la contracara, y se oye una melodía de Mozart, o se lee una poesía que emociona, se disfruta una película, surgen las risas ante las ocurrencias de los niños, se disfruta el sonido del mar y el viento de la tarde. Ya Freud nos recordó que en el paciente hay que eliminar la frustración innecesaria, pues con algo de ella habrá que lidiar en el empuje de la pulsión de vida. La película que suelo mencionar “El secreto de sus ojos”, de Ricardo Darín, tiene un final magistral. Tras más de veinte años de imposibilidad para él de poder permitirse iniciar una relación con la protagonista de la película, ella pues se casó, tuvo hijos, aunque siempre permaneció cerca de él, hasta que al final de la película, por circunstancia que acontecen y le hacen a él poder elaborar algo particular, acude a verla y al mirarse ella entiende lo que ya venía a decirle y se adelanta dicéndole: “será complicado”, a lo que él responde “no importa”, y ahí se cierra la puerta para un intenso y mágico final. Lo complicado permite, lo difícil suprime. Lo difícil tiene que ver con las situaciones que se tornan inalcanzables, donde el esfuerzo nunca será suficiente. El asunto es cuando se insiste en poder entenderse, lograr, acercarse a alguien, relación o situación que se torna difícil, pues probablemente lo que empuja allí poco tiene que ver con el yo voluntarioso. En la actualidad, las relaciones cada vez están más difíciles porque en su ímpetu de que no sean complicadas, se convierten en imposibles. Hay un cántico utópico y contemporáneo que dice que sólo se debe consumir alegría y bienestar y que cuando las cosas se tornan complicadas mejor dejarlo porque hay más lugares donde asistir. Pero la felicidad tangible suele ser modesta y la imaginaria suele ir ligada al debería de ser, que nada quiere saber en cuanto a lidiar con los agujeros de la imperfección. Cuando la gente se relaciona sin más, ponerse difícil es un método común de desapego y esquivo ante las complicaciones inherentes a las relaciones. Pero en casos extremos, llega a convertirse en un modo errado de vínculo, y es cuando el amor y el drama se entrelazan en las relaciones de maltrato por ejemplo, como un modo de sostener lo que de otra forma se diluye. Hay más formas donde las cosas se pueden poner difíciles y tienen que ver con el miedo y la angustia, tan diferentes entre sí, porque el primero protege y el otro sólo tiene la función de boicot al deseo, en medio de artificios imaginarios de: que pasaría sí…, cómo quedaría sí…, quitan el sueño y alejan a los sujetos del encuentro. El miedo y la angustia son libres, conviven en casi todos y hacen sus vericuetos en todo tipo de relación, personales y profesionales, y puede que en el campo del trabajo cierto punto de temple puede profesar seriedad e inspirar respeto, pero cuando esa posición se mantiene en el plano personal, sólo rompe en medio de entramados discursos duros y espacios donde las posibilidades se quedarán destinadas a caer, sin mencionar las consecuencias de la cosificación del otro. En la apuesta del vivir, lo complicado rondará antes o después, y no hay presagio suficientemente alto como para predestinar lo siempre sorpresivo del encuentro entre los sujetos. Pero cuando las cosas o personas se tornan difíciles, poco tratables o alcanzables, habrá que apearse a cuestionar-se para qué insistir y de ahí poder emprender nuevos andares. Comparto una canción de Pasión Vega llamada María, que relata esa posibilidad donde María se apea de lo difícil para comenzar desde lo complicado que ya comprende un nuevo inicio de vida. Lo complicado apertura, lo difícil aborta. |
TITULOSAUN
QUEDAN RAFAGAS DEL DIA DEL AMOR
EL HUMOR O EL "JIJIJAJA" "OTRO" NUEVO AÑO COMPLICADO SI, DIFICIL NO EL DUELO COMO PARTE DE LA VIDA UN DES-ENCUENTRO CON "LO REAL" Hablemos de los niños En el nombre del padre ¿Liderazgo femenino? ¿Me voy o me quedo? ¿Nos vamos o nos quedamos?... LAS RELACIONES DE PAREJA ¿Qué somos? ¿ESPERANDO AL PRINCIPE AZUL? MUJER!, ¿AMAS DEMASIADO? MUJERES QUE AMAN DEMASIADO VERSUS LA SOLEDAD AMOR O... ¿ENTRETENIMIENTO? EL ORIGEN DE LAS MUJERES QUE AMAN DEMASIADO PERO..., ¡SI YA TE LO DIJO! MUJERES QUE AMAN DEMASIADO EL PLACER DEL DISPLACER L@ AMO CON LOCURA CUANDO EL SINTOMA ES EL AMOR SUFRO PORQUE AMO...,TIENE SENTIDO..., ES POR AMOR AMOR U OBSESIÓN COMIENZA EL AÑO NUEVO..., ¿APOSTAMOS POR EL AMOR? EL MAL DE AMORES LA SUPER WOMAN ¿MARIPOSITAS ... y AMOR? MADRES E HIJAS, HERMOSA Y DIFICIL RELACIONO OTRA MIRADA SOBRE EL GRAN TORINO ME SACARON DEL FACEBOOK... ARTE TERAPIA: DESARROLLO PERSONAL Y CAMBIO ARTE TERAPIA LA AVENTURA DE LA CREACIÓN Y EL PSICOANÁLISIS ARTE TERAPIA para MUJERES QUE AMAN DEMASIADO ARTE TERAPIA Y PSICOANALISIS EN LA MODERNIDAD EXTINGUIR-TE |
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